Un gran legado

Por: Germán Vargas Lleras para el periódico El Tiempo
La Clínica Oncológica es de lejos la más importante de su género en América Latina.
El cáncer es la segunda causa de muerte, después de las enfermedades cardiovasculares, pero en el tratamiento de estas todo pareciera ya inventado. Con el cáncer sucede algo muy distinto. De 115.000 nuevos casos anuales, 50.000 personas fallecen en Colombia. Y este número crece cada año. Con esta enfermedad, lo clave es el diagnóstico oportuno, lo cual difícilmente ocurre en nuestro sistema de salud, en donde los exámenes y los tratamientos, y ni qué decir las cirugías, se programan a meses vista. Por supuesto, los colombianos más pobres esperan demasiado tiempo para tener un primer diagnóstico y es usual que la primera cita para el tratamiento se programe tardíamente, cuando ya no hay mucho que hacer.
Esta crítica situación fue la que motivó al empresario Luis Carlos Sarmiento Angulo a emprender el proyecto de la Clínica Oncológica, cuya preinauguración pasó algo inadvertida, y que muy pronto entrará en servicio. Todo estuvo a cargo del Ingeniero, como lo llaman respetuosamente sus colaboradores. Desde la selección y compra de los terrenos, la búsqueda de las firmas más reconocidas mundialmente en diseño y construcción de infraestructuras hospitalarias y especializadas en el tratamiento del cáncer hasta la construcción misma de las instalaciones y sus equipamientos. Este proyecto es una realidad gracias a la generosísima donación de la familia Sarmiento, que ya supera los 1,3 billones de pesos, a lo que se sumarán los recursos necesarios para su sostenimiento hasta que alcance su punto de equilibrio.
El proyecto, además de ser el más moderno hospital oncológico, también integra un centro de investigación, prevención y educación sobre el cáncer, concebido para prestar un servicio integral a pacientes y familiares y también para contribuir a la investigación global sobre esta enfermedad.
En su fase inicial, la clínica cuenta ya con más de 100.000 metros cuadrados de instalaciones, en donde se ofrecerán todos los servicios de hospitalización, cuidados intensivos, búnkeres para radioterapia, servicios de hematología y trasplante de médula ósea, medicina nuclear y todo lo relacionado con imágenes diagnósticas, quirófanos, laboratorios, servicios de genética, biología molecular y un centro de investigación dotado con los equipos más sofisticados.
Clave resaltar que en este centro funcionarán 12 clínicas en una sola, cada una dedicada a una especialidad de cáncer. Cito como ejemplos: gastrointestinal, mama, neuroendocrino, para mencionar los de mayor ocurrencia en Colombia.
Capítulo aparte merecen los equipos seleccionados. Dispone la clínica de los mismos que hoy tienen el MD Anderson o el Memorial Sloan. Todos de última tecnología, pero aquí en Bogotá. Por ejemplo, para radioterapia se cuenta con el ‘cyberknife’, que fue el que se utilizó en mi tratamiento en Estados Unidos. Como algo aprendí en carne propia, resalto que en todos los frentes se contará igualmente con lo mejor de lo mejor. No se escatimó un peso. Para los diagnósticos, la clínica dispondrá del reputado tomógrafo con emisión de protones, equipos de resonancia nuclear magnética y un equipo de mamografía 3D para biopsias de precisión. Igual ocurre con los laboratorios, que cuentan con lo más avanzado en genómica.
A los que ya pasamos por esto nos da enorme alegría poder disponer en nuestro país de servicios y equipos de calidad mundial, y a quienes en el futuro requerirán de ellos, mucha tranquilidad el saber que no tendrán que viajar para sus diagnósticos y tratamientos, pues estarán disponibles no solo para quien pueda sufragarlos, sino para cualquier paciente, bien del régimen contributivo o del subsidiado, o sea, de quienes jamás accederían a ellos.
Ojalá la clínica entre pronto en servicio y que la burocrática Secretaría de Salud de Bogotá no demore los trámites de habilitación que ya se iniciaron. Cada día cuenta.
La Clínica Oncológica es de lejos la más importante de su género en América Latina. No tengo duda de que hasta el presente es el legado más importante que una persona u organización hayan hecho al país. Por ello, todo nuestro reconocimiento a Luis Carlos Sarmiento Angulo, su familia y el equipo de profesionales que hicieron posible esta maravilla, incluido el doctor Luis Felipe Henao, gerente del proyecto.
GERMÁN VARGAS LLERAS
* Dirección Fundación Carlos Lleras
22 de mayo 2022